El aloe vera es una planta ampliamente conocida, originaria del suroeste de África, con más de 250 variedades distribuidas por todo el mundo. Suele crecer en climas cálidos y suelos relativamente áridos. Desde la época de los egipcios, se han aprovechado sus propiedades, siendo famosos personajes como Nefertiti y Cleopatra quienes las utilizaban. En el cono sur se le considera la “planta de la eternidad” o sagrada, mientras que en Europa, se popularizó durante la época de la peste, utilizándose para la desinfección de lugares públicos y privados.
En este blog hablaremos de los beneficios del Aloe vera, variedades, usos, etc.
Contiene componentes conocidos como la aloína, aloemodina y barbadina, entre otros. Se le atribuyen propiedades estimulantes de las secreciones estomacales y digestivas en dosis moderadas. Sin embargo, en dosis más altas puede actuar como laxante y en dosis superiores como purgante gástrico, lo que puede tener efectos negativos si se utiliza incorrectamente.
La planta se divide en dos fracciones principales: el gel y el acíbar:
- El gel de aloe vera es la pulpa transparente que se encuentra en el interior de las hojas, una vez que se ha retirado la cutícula verde. Está compuesto principalmente por agua, enzimas, ácidos orgánicos, vitaminas y mucopolisacáridos que le confieren su textura gelatinosa. Entre los componentes más destacados del gel se encuentra el acemano, conocido por su capacidad para regenerar las células y estimular los glóbulos blancos, que a su vez ayudan a combatir bacterias y gérmenes, así como a fortalecer el sistema inmunológico mediante la producción de interferón. Además, el gel contiene ácido acético, que posee propiedades bactericidas y antivirales, neutralizando toxinas bacterianas. El ácido cinámico presente en el gel actúa como fungicida y ayuda a limpiar las células muertas, mientras que proporciona un efecto calmante del dolor. Por último, el ácido crisofánico regula la actividad intestinal y puede ser útil en el tratamiento de afecciones de la piel como la psoriasis y las infecciones fúngicas cutáneas. Estos componentes hacen del gel de aloe vera un ingrediente valioso en productos para el cuidado de la piel y suplementos nutricionales.
- El acíbar es el látex amarillento que se extrae de la hoja mediante un corte y se encuentra debajo de las pencas de la hoja verde. Con un sabor amargo, el acíbar es muy rico en una sustancia llamada antraquinona, que constituye entre el 25% y el 40% de su composición. Las antraquinonas presentan propiedades antibióticas, antivirales, antifúngicas y protectoras contra los rayos ultravioleta. Además, se ha observado que tienen efectos antitumorales. Aunque el acíbar puede tener beneficios terapéuticos, su consumo debe ser moderado debido a su potencial efecto laxante y purgante.
Variedades de Aloe vera
La antraquinona, cuando se toma de forma aislada, puede ser tóxica; sin embargo, en conjunto con todos los demás componentes de la planta, su toxicidad se ve mitigada. Conociendo tanto los beneficios como los riesgos, el uso del aloe vera puede ser beneficioso, especialmente en problemas intestinales como hinchazón, dolencias e incluso parásitos, ya que posee propiedades para destruir y eliminar patógenos.
Las tres variedades principales de aloe (ferox, vera y arborescens) se distinguen por la cantidad de acíbar y gel que contienen. El aloe vera, por ejemplo, es el que posee una mayor cantidad de gel y menos acíbar. El aloe ferox, en cambio, tiene una mayor concentración de acíbar, lo que lo hace más adecuado para problemas de piel e intestino grueso, así como para su uso como laxante.
El aloe destaca por su riqueza en nutrientes y vitaminas, incluyendo 9 vitaminas esenciales que el cuerpo no produce (como la A, E, B1, B2, B3, B6, B12, C, ácido fólico y colina). También proporciona 15 de los 21 minerales necesarios, destacando el germanio orgánico, conocido por su poder anti cancerígeno. Estas características especiales del aloe vera lo convierten en un agente estimulante de la regeneración celular, antiinflamatorio (útil en casos de artritis), y fortalecedor del sistema inmunológico, lo que explica sus propiedades curativas para la piel y su amplio uso terapéutico.
Usos del Aloe vera
El gel de aloe vera puede ser utilizado tanto de forma interna como externa debido a sus múltiples beneficios para la salud:
Uso Externo:
- En hemorroides, su capacidad para activar la circulación sanguínea y su efecto local pueden ayudar a aliviar los síntomas y neutralizar el picor.
- Es útil en heridas, quemaduras y lesiones cutáneas, ya que oxigena las células epiteliales, promueve la cicatrización y calma la piel irritada.
- Ayuda a la formación de colágeno, nutriendo las células de la piel e hidratándola desde adentro hacia afuera.
- Tiene propiedades antisépticas y fungicidas que pueden mejorar las infecciones bucales, como la gingivitis y las encías sensibles.
Uso Interno:
- Posee propiedades regeneradoras celulares que pueden ser beneficiosas para la salud en general.
- Regula el reflujo ácido y el tránsito intestinal gracias a los componentes presentes en el acíbar.
- Contribuye a la recuperación de las mucosas del intestino grueso y de la piel, reduciendo la inflamación y promoviendo la salud gastrointestinal.
- Es efectivo para tratar úlceras de estómago y duodeno, acidez por reflujo, hernia de hiato, gastritis, debido a su capacidad regeneradora de las mucosas y su papel como colagogo.
- Puede ser útil en enfermedades inmunitarias de las mucosas y de la piel, gracias a su efecto regenerador y modulador del sistema inmunitario, especialmente después de la quimioterapia, gracias a su poder antioxidante.
- Se ha observado que puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en una gran parte de la población.
Es importante destacar que el aloe vera es rico en fibra, que al ser digerida en el intestino, aumenta el bolo intestinal y favorece el tránsito intestinal. Esto puede ser beneficioso para condiciones como la diverticulosis y el síndrome de colon irritable relacionado con cambios en la dieta. Además, esta propiedad le confiere al aloe vera una gran capacidad de arrastre, lo que lo convierte en un excelente desintoxicante. Puede ayudar a eliminar metales pesados y toxinas derivadas del metabolismo bacteriano, promoviendo así la salud intestinal y general.
Cómo emplear el Aloe vera
El uso recomendado del zumo de aloe vera suele ser de una cucharada después de las comidas, acompañado de una dieta adecuada que sea respetuosa con las mucosas. Esta práctica ayuda a aprovechar los beneficios del aloe vera para la salud digestiva y general, al tiempo que se asegura una buena absorción de sus nutrientes y compuestos activos.
Para tratar enfermedades intestinales, hinchazón, flatulencia, gases, parásitos y afecciones relacionadas, buscamos el efecto limpiador y antiséptico proporcionado por la antraquinona, con suave acción laxante. Es importante no exceder la dosis de 30 mg para evitar un aumento excesivo del peristaltismo intestinal.
En el caso de la psoriasis, el gel de aloe vera puede aliviar el picor cuando se utiliza tanto interna como externamente durante un período de 15 días.
Para el herpes labial y genital, así como para la higiene y salud bucal, el aloe vera muestra su poder astringente, lo que lo hace útil en condiciones como gingivitis, orzuelos y anginas. Se puede diluir el gel en agua al 50% para su aplicación. Es importante seguir las recomendaciones de dosificación y consultar con un profesional de la salud en caso de dudas o condiciones médicas preexistentes.
El aloe vera también es útil para tratar picaduras de insectos y el acné. En pieles grasas, se recomienda utilizar un gel que contenga un poco más de antraquinona, mientras que en pieles secas puede causar irritación, por lo que es preferible usar mezclas con aloe.
El gel de aloe vera se puede tomar directamente ya que contiene una cantidad mínima de aloína, el principio activo del acíbar. El jugo, por otro lado, contiene aloína y gel, pero se le ha eliminado la fibra externa. En caso de intolerancia, se sugiere reducir la cantidad y diluir en agua hasta alcanzar la dosis adecuada.
Las cápsulas de aloe vera son beneficiosas para la salud intestinal, y para la piel no hay mejor opción. En muchas ocasiones, los problemas cutáneos como eccemas pueden ser el reflejo de problemas intestinales, por lo que mantener un intestino saludable puede mejorar significativamente la salud de la piel. Es importante seguir las indicaciones de dosificación y consultar con un profesional de la salud antes de utilizar suplementos de aloe vera.
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