Descripción
El agar-agar se obtiene principalmente del alga roja Gelidium, recogida en el Océano Atlántico. Es un conjunto de algas hervidas y secadas, deliciosa en la preparación de gelatinas con frutas, verduras o leguminosas.
El agar-agar es muy rico en fibra soluble y minerales, por lo que ayuda a regular el tránsito intestinal, colesterol, diabetes, y prevenir el sobrepeso. Es muy digestivo y ayuda a la evacuación intestinal. Tiene muy pocas calorías y al mismo tiempo llena el estómago, por lo que está recomendado en curas de adelgazamiento.
Propiedades nutritivas
El agar-agar contiene 94,80% de fibra natural soluble, lo que supone una cantidad superior al resto de los alimentos de origen vegetal. Hay que tener en cuenta que los alimentos enriquecidos en fibra (panes, galletas, cereales de desayuno, salvados, etc.) contienen del 6% al 45% de fibra, y en los suplementos dietéticos, tabletas y granulados, esta cantidad oscila entre el 20% y el 80%.
La incorporación de agar-agar de MIMASA en la dieta nos facilita la ingesta de fibra diaria recomendada, que es de 30 gramos. El agar-agar no contiene ni azúcares ni grasas y su aporte calórico es nulo. Al no contener azúcares ni gluten, es apto para personas diabéticas y celíacas.
Además de presentar numerosos beneficios dietéticos, el agar-agar ayuda a prevenir el sobrepeso, ya que no aporta ninguna caloría al organismo y presenta un alto poder saciante; el estreñimiento, porque regula el tránsito intestinal y regenera, a la vez que suaviza, las paredes intestinales; y el colesterol y la diabetes, ya que disminuye la absorción de colesterol, grasas y azúcar en el organismo.
Una vez cocinado, el agar-agar de MIMASA forma un gel de textura suave que no presenta ningún problema de masticación ni de deglución. Por este motivo, resulta idóneo para las personas mayores. Asimismo, debido a su capacidad para captar y mantener el líquido ingerido en las dietas, previene la deshidratación.
Uso culinario
El agar-agar de MIMASA se utiliza para dar textura a cualquier alimento, ya sea dulce o salado, formando gelatinas completamente transparentes, sin aportar ningún sabor. Presenta un poder de gelificación 10 veces mayor que la gelatina de origen animal. Además, permite ser calentado conservando su textura y consistencia (hasta 85 ºC). Así pues, es ideal en casos de platos calientes donde se requiera calentar la gelatina junto con los otros ingredientes.
Su prepararción es muy simple: hay que disolver el agar-agar de MIMASA en un líquido (agua, leche, zumo, caldo, etc.) y hervirlo durante un minuto, removiendo hasta su completa disolución. La mezcla se lleva a un molde y se deja enfriar para que gelifique de manera rápida.
Podemos elegir la consistencia que queramos modificando la cantidad de agar-agar de MIMASA que añadimos al agua. De esta manera, obtendremos una gelatina firme y consistente utilizando más agar-agar de MIMASA, y una más suave y cremosa si utilizamos menos cantidad.